EL TULIPÁN NEGRO – alejandro dumas

Clásico de aventuras en el que un joven rico y soñador, dedicado al cultivo de tulipanes cuando los Países Bajos enloquecían por ellos, se ve envuelto sin querer en una conspiración política y, convertido en prisionero de Estado, se enamora de la hija de su carcelero. Aunque, en realidad, todo lo que desea es cultivar tulipanes…

Con humor y hasta guasa, Dumas entretiene con una novela sencilla. Se dirige constantemente al lector —para mi gusto, demasiado— y hace gala de sus recursos novelísticos sin ningún pudor, lo que acrecienta la sensación de estar leyendo a un guasón. El trasfondo político se describe con ironía, sobre todo en lo tocante a Francia, la patria del autor, sin llegar a entrar del todo en la historia.

Una novela, en fin, agradable de leer y que sabe no tomarse a sí misma demasiado en serio.

escrito en francés | leído en español

MIRACLE OF THE ROSE – jean genet

Jean Genet fue un hombre que se pasó media vida entre el reformatorio y la prisión, vivió su homosexualidad muy naturalmente en una época en que se consideraba de todo menos natural, y encontró tiempo para dedicarse a la literatura y al drama, campos en los que además triunfó, convirtiéndose en un clásico de la literatura francesa del siglo XX.

Yo le dije a Rafa que jamás había escuchado nada sobre él, y Rafa me preguntó si había leído a Mishima y a Baudelaire. Un profesor universitario me introdujo a Baudelaire, del que en su día leí varias obras («El pintor de la vida moderna», «Las flores del mal», «El esplín de París», «La Fanfarlo», «Los paraísos artificiales», «El vino y el hachís). Mishima vino recomendado por mi profesor de guitarra, y se convirtió en uno de mis escritores favoritos; de él también he leído varias obras: «El pabellón de oro», «Música», «Confesiones de una máscara«, «Los años verdes«. Rafa me dijo que, si me gustaban Mishima y Baudelaire, Genet me iba a encantar.

No sé que relación hay entre los tres autores ni por qué Genet había de gustarme. Leer su prosa difícil, enrevesada, falta de las estructuras habituales, repetitiva, ha sido una tortura. Bien escrita, pues sí, pero a costa de perderse en sí misma. La novela semiautobiográfica de Genet mezcla constantemente, con un realismo digamos mágico (aunque aplicando el término retrospectivamente) y no lineal, recuerdos reales o inventados del reformatorio y la cárcel, donde todos los críos parecen ser gais y se torturan para alcanzar el ideal de una masculinidad que hace saltar todas las alarmas de toxicidad. Hasta aquí, todo bien: los ingredientes para una novela escandalosamente buena. Genet, además, se gasta una prosa poética y preciosista, rota de la mejor manera por las metáforas más soeces que uno pueda inventar. Pero a mí la novela me ha resultado tortuosa, cargante, y a punto he estado de dejar de leerla varias veces.

Algunas páginas me han gustado, han conseguido hacerme entender lo que se contaba pese a la dificultad de la lectura, y transmitir emociones. Pero entonces me he dado cuenta de que todos los recursos de Genet no hacen más que ensalzar, de la manera más bella posible, los actos más abyectos del ser humano, y en lugar de inspiración he terminado por sentir asco.

Ay, ya lo siento, pero Genet no es para mí…

escrito en francés | leído en inglés

A SINGLE MAN – christopher isherwood

«But you can’t fool a dirty old man; he isn’t sentimental about Young Love; he knows just how much it’s worth — a great deal, but not everything«.

Ah, fantástico.

¿Qué es esta novela corta exactamente? ¿Una confesión, un testamento a la experiencia, una justificación de las decisiones tomadas? George es un profesor universitario británico que vive en un suburbio de Los Ángeles algunos años después de terminar la Segunda Guerra Mundial. Le vemos lidiar con la pérdida de su pareja: Jim, con sus vecinos, con sus amigos y con sus estudiantes. George recuerda el pasado y a veces piensa en el futuro, pero su atención se centra sobre todo en el presente.

Tras un comienzo quizá algo seco -o esa fue mi impresión-, la narración se llena pronto de maravillas. Con humor, con ironía, van apareciendo temas que emocionan poco a poco hasta llegar al gran final: la pérdida, la edad, el descubrimiento de la sexualidad, la vanidad, la amistad, la soledad, el rechazo social, el debate intergeneracional, la nostalgia del expatriado, la importancia de los ensueños. Con escenas escasas pero vívidas y profundas, todos estos temas nos hablan al corazón y nos cuentan lo que significa ser humano.

No hay duda de que me ha encantado. Es distinta a lo que recuerdo de «Goodbye to Berlin«, la única otra novela del autor que he leído. La sensación que me causaron varias partes del texto la relaciono con «Stoner«, pese que apenas recuerdo su argumento y el tono de «A Single Man» es, decididamente y pese a la profundidad de sus temáticas, más alegre y esperanzador. El modo de expresar y superar la pérdida de un ser querido me ha traído memorias de la emotiva «H is for Hawk«, aunque el argumento sea muy diferente.

Y la próxima de Isherwood, porque habrá una próxima…

escrito en inglés | leído en inglés

MARIO UND DER ZAUBERER – thomas mann

Thomas Mann es un escritor abstracto que escribe bellamente y de una manera bastante filosófica, retratando las angustias de su tiempo y de su edad sin darles, necesariamente, solución. Debí de leer «Muerte en Venecia» a los 20 años; más recientemente, en 2020, leí «La montaña mágica«. Es la primera vez que leo una de sus obras en el original, este «Mario y el mago» que compré en una librería de saldo de Múnich en julio del año pasado.

Su estilo me ha resultado difícil de leer, más o menos, la mitad del tiempo; claro que esto también sucedió al leer su obra en español. Y es que Mann introduce las impresiones culturales, las preguntas y las dudas a través de descripciones que se ensanchan a lo largo de frases expansivas. Su historia, dejando aparte el lenguaje y al igual que en sus otros libros, es también difícil de entender. Aunque los hechos se siguen con una facilidad relativa, queda la impresión de que los sucesos reales van más allá de los hechos mismos, de que debe existir una comprensión ulterior que yo creí aprehender en «Muerte en Venecia», pero se me escapa en «La montaña mágica» y en este «Mario y el mago». Una ojeada a internet me dice que el libro puede interpretarse como una metáfora del surgimiento del fascismo; si es así, me falta base para reconocerlo.

Pero esta supuesta falta por mi parte no impide que disfrute de otros aspectos de la novela. Mann transmite con claridad las emociones del narrador, un turista alemán que veranea con su familia en un pueblecito italiano y que, no sintiéndose bienvenido en el paseo marítimo, tomado ese año por el turismo nacional, decide llevar a sus hijos a un espectáculo de magia. Mario es, hasta casi el final de la novela, un personaje secundario, un muchacho en cierta medida puro que deambula por el pueblo y forma parte de su paisaje.

Sobre el final, sin destriparlo, puedo decir que entronca sus temas, en cierta medida, con «Muerte en Venecia», acaso diga más sobre su autor que sobre el tiempo de éste.

escrito en alemán | leído en alemán

UN VIEJO QUE LEÍA NOVELAS DE AMOR – luis sepúlveda

En la Amazonia ecuatoriana, un dentista visita un poblado de gentes embrutecidas, colonos llegados de otras partes del país merced a un imperfecto programa gubernamental de incentivos. Allí se mezclan con los salvajes shuar, etnia semicivilizada y nómada que poco a poco huye, como los animales, del límite menguante de la selva.

La historia cambia, de improviso, su punto de vista. Ya no importa el dentista sino uno de los viejos colonos, que ha pasado parte de su vida viviendo entre los salvajes y adoptando sus costumbres, y a quien el dentista le trae desde Guayaquil novelas románticas de un prostíbulo, que él lee pausadamente para sobrellevar la pesadez perezosa durante la época de las lluvias. Cuando un gringo mata a unos cachorros de tigrillo, la madre enloquece y busca matar a los hombres. El viejo, entonces, alcanza protagonismo como gran conocedor de la jungla.

Esta novela breve rezuma amor por la naturaleza, censura ante los desastres ecológicos humanos, brutalidad e ironía. Está contada con arte y una sencillez aparente. Es muy bella. La lucha entre el hombre y el animal ha terminado recordándome a «El viejo y el mar»; pero mientras aquella obra terminó resultándome, pese a su brevedad, larga para lo que desea contar, ésta me ha sabido a poco: me ha parecido que podría decirse tanto más, que abre un mundo de posibilidades tan grande como la Amazonia misma.

escrito en español | leído en español

LA NÁUSEA – jean-paul sartre

Tardé dos tercios del libro en meterme de lleno en esta novela filosófica de Sartre. Durante muchas páginas mi mente se distraía constantemente ante una lectura ligera de retórica, pero densa de carácter, que gira de manera circular ante la aparente absurdidad de la existencia, entendida como esencia de las cosas; es decir, sin importar lo que se haga o deje de hacer. Meterse en la lectura significó sentir curiosidad y ganas de seguir leyendo, aunque no diría engancharse. Y es que el tono de la novela es lúgubre, demasiado, y los diálogos son artificiosos.

La historia es la de Antoine, un hombre que con treinta años ha dejado de viajar por todo el mundo para instalarse en una ciudad francesa de provincias, donde intenta escribir la biografía de un hombre ilustre por hacer algo. Su conciencia encuentra las cosas como son, literalmente: tal como existen. E igual con las que no existen, las cuales incluyen su pasado. Se junta con otro hombre, un ratón de biblioteca al que odia y quien discute su manera de pensar, mientras suspira por una mujer, antigua compañera de aventuras, cuyo carácter es bastante odioso y que termina dándole vueltas a las mismas ideas que el protagonista.

No sé qué esperaba de Sartre; algo distinto, quizá algo más «literario». O incluso todo lo contrario: una historia como mera excusa para desarrollar un pensamiento filósofo a la manera de «El banquete» o de «Así habló Zaratustra«. Esta novela me da la impresión de quedarse en medias tintas: no alcanza a ser una novela al uso que desarrolle ideas más o menos veladas, pero tampoco las expone extensamente sin necesidad alguna de desarrollar una historia o unos personajes.

Lean y juzguen.

escrito en francés | leído en español

MIESES KARMA – david safier

Kim Lange es una presentadora de televisión exitosa cuya ambición le lleva a imponerse a sus rivales por cualquier medio. Durante la recogida de un premio importante para su carrera, su mente está en cómo el vestido que ha alquilado lucirá sus posaderas y en si se atreverá a ponerle los cuernos a su marido con un compañero de profesión. A todo esto, un pedazo de un satélite ruso que no se ha desintegrado en la atmósfera la mata. Se encuentra entonces con Buda antes de reencarnarse en hormiga.

Así comienza esta historia hilarante de humor absurdo que sigue las peripecias de Kim de reencarnación en reencarnación junto a nada menos que Casanova. Juntos intentan recuperar a la familia de Kim mientras aprenden a reunir un buen karma.

Pese a su sencillez narrativa y a su absurdidad argumental, mentiría si dijera que no me ha gustado. Lo cierto es que se trata de una novela muy divertida y que engancha, con un lenguaje asequible y moderno (que en el caso del alemán, está plagado de anglicismos), y cuya estética desenfadada me parece muy bien conseguida. Sin duda una de las lecturas que más he disfrutado leer en el original alemán hasta la fecha. Poco imaginaba lo que me iba a enganchar cuando, hace unos meses, tomé este libro de una alacena para intercambio de libros en plena ciudad de Luxemburgo.

escrito en alemán | leído en alemán

HOWARDS END – edward morgan forster

Sigo recordando «The Inheritance» como una de las mejores obras de teatro que he visto, si no la mejor. Entonces alguien me dijo que su segunda parte estaba inspirada en «Howards End». Ambas obras se parecen como un huevo a una castaña, pero ésa fue la razón por la que decidí acercarme a la obra de Forster, años después, mediante esta novela en lugar de con aquéllas que más resuenan en España: «Pasaje a la India» y «Una habitación con vistas».

No sé muy bien por qué me he sentido tan fascinado leyendo una historia que pretendía escandalizar hace más de cien años con hechos que hoy sentimos superados, escrita con un deje paternalista y con una filosofía más bien hermética. Y sin embargo, «Howards End» me parece brillante. Trata con crudeza poética sus temas desde ángulos encontrados; existen las contradicciones, los cambios de opinión, la impureza. Hay hipocresía, diferencias irreconciliables de clases, indiferencia, egoísmo. Se habla de dinero sin pelos en la lengua a la vez que se utilizan metáforas y personajes que representan ideales no muy definidos que, sin embargo, atraviesan toda la historia. Una historia que, a decir verdad, me ha enganchado y me ha hecho sentir y pensar. Una gran historia.

escrito en inglés | leído en inglés

LAS DIMENSIONES DEL TEATRO – rafael peñas

Rafael, a quien he conocido en Londres a través de una cadena de amigos en común, me ha introducido a tertulias poéticas y me ha prestado esta copia de su primera novela, anterior a aquélla que mereció el premio Terenci Moix.

La novela sigue los pasos de Dionisio, un joven barcelonés que regresa a casa tras vivir diez años en Londres. Frustrado por el final de una relación amorosa, vuelve con la perspectiva de enfrentar una serie de problemas familiares: enfermedad, reproches, drogas. Los paisajes que ve y las situaciones que presencia le recuerdan su pasado reciente, que revive como un fracaso de sus sueños de niñez y ensombrecen buena parte de la primera mitad de la historia. Un chico que lleva a cabo una heroicidad al comienzo de su viaje, y al que desea conocer, se le aparece como la única vela en la oscuridad. Poco a poco vamos conociendo más sobre su familia, que se convierte en una alegoría de la sordidez de dos generaciones del siglo XX español: la de los apuros materiales de la posguerra y la transida por la heroína que vino después.

La escritura se deja leer con facilidad. Hay un cierto derroche adjetival y referencial al comienzo que Rafael va domando poco a poco según la historia avanza y sobre el que ya hablaremos con una cerveza delante. Me gusta el breve espacio de tiempo en el que transcurre la historia y me gusta que la homosexualidad del protagonista lo defina sin agarrarse a tópicos tremendistas que, cuando apareció la novela 2003, andaban muy en boga todavía. Ahora toca leer su segunda novela.

escrito en español | leído en español

JACQUES EL FATALISTA – denis diderot

Se me perdonará que comience esta breve reseña con una digresión, y sobre todo me lo perdonará Diderot, ya que ése es el recurso principal de su novela.

En 2011, una de las últimas asignaturas en la universidad me llevó a leer «El arte de la novela» de Milan Kundera, algo totalmente innecesario para aprobar esa asignatura. El caso es que ese conjunto de ensayos de Kundera se convirtió en uno de los libros más influyentes en mi vida adulta. Además me gustó mucho más sus novelas, que hasta entonces apenas había entendido. Ese año fue uno de lecturas que en general marcaron mi pensamiento y mis gustos durante muchísimo tiempo, con «Armas, gérmenes y acero» de Jared Diamond y «Rayuela» de Julio Cortázar a la cabeza. Pero ya me voy demasiado por las ramas…

El caso es que Kundera ponía a Diderot por todo lo alto a causa de su novela «Jacques el fatalista», que tiene en altísima estima como pieza fundamental en la historia de la novela junto con «Don Quijote de la Mancha«. En 2012, acabada la carrera y viviendo en otro lugar, la vi en una librería y la compré. Comencé a leerla a comienzos de 2013, pero apenas conseguí meterme en su lectura. Mi cabeza estaba en otro sitio porque me mudaba a Ámsterdam. Debía decidir qué meter en mi maleta y la novela quedó fuera. En todos estos años no había vuelto a abrirla, pero tampoco había olvidado los elogios que Kundera le dedicara. Así que este septiembre de 2023, más de una década después, la abrí de nuevo, descarté la señal de lectura y empecé a leerla desde el principio.

Y vaya si me reí. Me he divertido muchísimo leyendo esta comedia de dos hombres que viajan juntos y tratan de contarse historias de faldas. Si Cervantes parodia las historias de caballerías, Diderot parodia los romances pornográficos y lo hace, por supuesto, con gracia y sencillez. Personajes secundarios y el propio narrador, que hace metaliteratura, interrumpen las historias constantemente de una manera tan postmoderna que, si no fuera porque la trama y el lenguaje sitúan la novela en el siglo XVIII, la pensaría contemporánea de «Si una noche de invierno un viajero» o «Matadero cinco«. Me ha parecido un libro tan bueno que apenas creo que Diderot no lo publicara en vida.

La traducción de Félix de Azúa para Punto de Lectura me ha parecido, además, excelente. Corramos un tupido velo ante aquello de «nuevísimo» en lugar de «novísimo». Aparte de eso, tanto su traducción como sus notas al pie me han parecido muy bien llevadas. Y como esta entrada ya resulta más larga de lo acostumbrado, aquí la dejo con mi recomendación.

escrito en francés | leído en español