MARIO UND DER ZAUBERER – thomas mann

Thomas Mann es un escritor abstracto que escribe bellamente y de una manera bastante filosófica, retratando las angustias de su tiempo y de su edad sin darles, necesariamente, solución. Debí de leer «Muerte en Venecia» a los 20 años; más recientemente, en 2020, leí «La montaña mágica«. Es la primera vez que leo una de sus obras en el original, este «Mario y el mago» que compré en una librería de saldo de Múnich en julio del año pasado.

Su estilo me ha resultado difícil de leer, más o menos, la mitad del tiempo; claro que esto también sucedió al leer su obra en español. Y es que Mann introduce las impresiones culturales, las preguntas y las dudas a través de descripciones que se ensanchan a lo largo de frases expansivas. Su historia, dejando aparte el lenguaje y al igual que en sus otros libros, es también difícil de entender. Aunque los hechos se siguen con una facilidad relativa, queda la impresión de que los sucesos reales van más allá de los hechos mismos, de que debe existir una comprensión ulterior que yo creí aprehender en «Muerte en Venecia», pero se me escapa en «La montaña mágica» y en este «Mario y el mago». Una ojeada a internet me dice que el libro puede interpretarse como una metáfora del surgimiento del fascismo; si es así, me falta base para reconocerlo.

Pero esta supuesta falta por mi parte no impide que disfrute de otros aspectos de la novela. Mann transmite con claridad las emociones del narrador, un turista alemán que veranea con su familia en un pueblecito italiano y que, no sintiéndose bienvenido en el paseo marítimo, tomado ese año por el turismo nacional, decide llevar a sus hijos a un espectáculo de magia. Mario es, hasta casi el final de la novela, un personaje secundario, un muchacho en cierta medida puro que deambula por el pueblo y forma parte de su paisaje.

Sobre el final, sin destriparlo, puedo decir que entronca sus temas, en cierta medida, con «Muerte en Venecia», acaso diga más sobre su autor que sobre el tiempo de éste.

escrito en alemán | leído en alemán

MIESES KARMA – david safier

Kim Lange es una presentadora de televisión exitosa cuya ambición le lleva a imponerse a sus rivales por cualquier medio. Durante la recogida de un premio importante para su carrera, su mente está en cómo el vestido que ha alquilado lucirá sus posaderas y en si se atreverá a ponerle los cuernos a su marido con un compañero de profesión. A todo esto, un pedazo de un satélite ruso que no se ha desintegrado en la atmósfera la mata. Se encuentra entonces con Buda antes de reencarnarse en hormiga.

Así comienza esta historia hilarante de humor absurdo que sigue las peripecias de Kim de reencarnación en reencarnación junto a nada menos que Casanova. Juntos intentan recuperar a la familia de Kim mientras aprenden a reunir un buen karma.

Pese a su sencillez narrativa y a su absurdidad argumental, mentiría si dijera que no me ha gustado. Lo cierto es que se trata de una novela muy divertida y que engancha, con un lenguaje asequible y moderno (que en el caso del alemán, está plagado de anglicismos), y cuya estética desenfadada me parece muy bien conseguida. Sin duda una de las lecturas que más he disfrutado leer en el original alemán hasta la fecha. Poco imaginaba lo que me iba a enganchar cuando, hace unos meses, tomé este libro de una alacena para intercambio de libros en plena ciudad de Luxemburgo.

escrito en alemán | leído en alemán

DIE STIMMEN VON MARRAKESCH – elias canetti

Canetti viajó al Marruecos francés en 1954 con el equipo de rodaje de una película. En este breve libro de viajes relata sus experiencias e impresiones desde la ignorancia de un extranjero que se compadece de la pobreza local y se interesa por la cultura y las costumbres del lugar que visita. Escribe de manera tierna y cercana, y sin embargo no pude evitar la distancia cultural que le separa de los marroquíes; es esa impresión de maravilla del narrador lo que transmite fuerza: no se trata del relato de un erudito que quiera explicarnos cosas, sino del recuento sincero de un viajero maravillado (y a veces asqueado) por lo que ve.

El libro está dividido en capítulos cortos que relatan experiencias distintas y normalmente desconectadas entre sí. El más impactante es probablemente «Die Verleumdung» («La calumnia»), y estoy convencido de haberlo leído ya en una antología de relatos alemanes. El relato es un recuento cruel, obsceno y triste, pero también (al principio) gracioso e inocente, sobre la prostitución infantil.

En fin, me ha gustado mucho este libro sencillo que transporta la imaginación a otros tiempos y a otras geografías, que se lee fácilmente y da ganas de seguir leyendo una vez se ha terminado ya.

escrito en alemán | leído en alemán

GESAMMELTE WERKE. DIE GEDICHTE – rainer maria rilke

Alegre, optimista, piadosa; hacia el final: oscura, ambivalente, difícil; y siempre densa, culta y sonora. Así me ha parecido la poesía de Rilke que, en teoría completa, ofrece Anaconda en esta edición de mil páginas.

Leer a Rilke no es fácil, y menos en una edición sin presentaciones ni notas al pie. Aunque este tipo de ediciones suelen abusar de añadidos, no tener ninguno me parece mala idea. Ni siquiera sabía que las secciones intercaladas entre los libros publicados eran de poemas inéditos, muchos de ellos simples fragmentos incompletos, hasta que la lectura lo dejó en evidencia. La calidad de la encuadernación, la presentación y la impresión son, sin embargo, muy buenas.

Hay Rilke para aburrir, y me he aburrido leyéndolo a veces. Páginas y páginas de una poesía métrica y rimada sobre un número de temas limitado obran el efecto de que, si se lee muy de seguido, todo parezca igual. Aunque no lo es. Los poemas de juventud sobre su Praga natal me provocaron una sonrisa y me devolvieron recuerdos de esa ciudad, a la que tengo un cariño especial. Aunque me costó entrar en su poesía mística, profundamente religiosa, lo hice de lleno con la primera parte de su Libro de las horas. Y quizá sean esos poemas bienintencionados y agradables, que imaginan a un monje devoto pensando en Dios, los que más me han gustado y de donde más citas he extraído. Después llegó el aburrimiento, el más de lo mismo, para terminar en una nota distinta, en los tonos más oscuros y la rima ausente de las elegías, y en la complejidad temática y acaso moral de los Sonetos a Orfeo.

Y termino con una cita: «Du musst das Leben nicht verstehen, / dann wird es werden wie ein Fest» – «No debes comprender la vida, / para que así se convierta en una fiesta».

escrito en alemán | leído en alemán

SIDDHARTHA – hermann hesse

Libro bello, sencillo, profundo. Siddhartha abandona la casa de su padre, un brahmán santurrón y apreciado en su comunidad, en busca del conocimiento último, aquél que a acabe con todo sufrimiento existencial. Aprende de diversos maestros y a todos renuncia, huye de doctrinas y desarrolla una espiritualidad propia. Porque, según Siddhartha, es posible transmitir el saber, pero no la sabiduría.

Este libro habla, para mí, de lo que nos hace humanos, reconciliándonos con ello y con el mundo que nos rodea. Muchos artículos y documentales lo analizan mucho mejor de lo que yo podría hacerlo; la versión de deBolsillo que he leído lleva adjunta una guía escolar de lectura. Yo sólo quiero decir dos cosas. La primera es que Herman Hesse me ganó por su profundidad con El lobo estepario y por su belleza y sencillez con sus cuentos. Siddhartha aúna lo uno y lo otro y pone a Hesse muy arriba en mi nebulosa lista de autores preferidos. La seguda es que varias veces, de pronto y sin causa aparente, Siddhartha me ha hecho llorar un llanto extraño, largo, ni feliz ni triste; creo que la lectura tocó puntos blandos y me hizo darme cuenta de ciertas cosas antes de que yo mismo pudiera reflexionarlas o sentirlas.

escrito en alemán | leído en español

LINKS, WO DAS HERZ IST – leonhard frank

Creo que es la primera vez que disfruto y me emociono leyendo una novela en alemán para la que, además, no he usado el diccionario ni una sola vez. Leonhard Frank habla para el corazón, y no solo para la cabeza, con un lenguaje sencillo que nos cuenta su autobiografía. Cuidado, porque vienen spoilers.
Michael, alter ego del autor, nace en el seno de una familia muy pobre de Würzburg, una pequeña ciudad alemana. Crece aprendiendo el oficio de su padre y creyendo, por culpa de un profesor, que será siempre un don nadie. Pronto se desplaza a Múnich y se adentra en su círculo bohemio, entrando en contacto con el famoso grupo Der Blaue Reiter, liderado por Kandinsky, un socialista republicano español, advocados del psicoanálisis y demás fauna local. El autor nos transmite con sencillez e ironía fina su opinión sobre la petulancia bohemia, cosa que hará después en otras ocasiones. En Múnich aprende a ser pintor, tiene un primer noviazgo que acaba con su novia poniéndole los cuernos y yéndose con un cocainómano, se da cuenta de que la pintura no es lo suyo y se muda a Berlín. Allí conoce a su primera esposa y escribe su primera novela, que es todo un éxito. Y aquí comienza la metaliteratura, porque el autor nos dice por qué empezó a escribirla y nos da pinceladas sobre su método de trabajo y su ideal literario. A lo largo del libro nos hablará de cómo sus vivencias influyen en su literatura y viceversa, y a mí me parece que ésta es una de sus fortalezas.
Mientras escribe su primera novela, Michael conoce a su primera esposa y su gran amor, Lisa, y recibe la visita de su madre antes de la publicación. Su madre, poco menos que iletrada y movida por las paupérrimas condiciones de vida de su hijo y su mujer, decide escribir una novela para ayudarle. En una de las secciones más emotivas de libro, Michael recibe un manuscrito de su madre sorprendentemente genial y que describe su vida; eso sí, escrito sin una sola coma.
No me quiero extender mucho en esta reseña. Diré sólo que que el autor describe cómo emigra a Suiza durante la Primera Guerra Mundial; convencido socialista y antibelicista, vuelve a Berlín, se convierte en enemigo del nazismo, que prohíbe sus novelas, huye a Francia, donde el gobierno lo trata como potencialmente peligroso pese a ser refugiado político, huye a pie de la ocupación alemana a la Francia de Vichy, destapando la connivencia de ésta con los nazis, consigue llegar a Estados Unidos pasando por España y Portugal, describe su trabajo en Hollywood, destaca la bienvenida que los estadounidenses dan a los europeos, pero también denuncia el salvajismo de su capitalismo, y regresa a Berlín después de la Segunda Guerra Mundial, conocido mundialmente por sus novelas y desconocido en su país debido a la prohibición de sus libros impuesta por el gobierno nazi. Entre tanto, Michael vive amores y desamores, tiene un hijo, se relaciona con gente como Tristan Tzara y Thomas Mann, y nos cuenta todo con brevedad y precisión, en una novels -y una vida- de película.
Casi todo en el libro me ha parecido excelente, aunque en ocasiones es bastante político y no todas sus ideas resisten igual de bien el paso del tiempo. Michael (o Leonhard, el autor), que se las da de muy progresista y se enfada ante el antisemitismo, tiene pensamientos homófobos y no se escandaliza ante el amor entre un hombre de media edad y una jovencita; termina la novela, también, con un alegato anticapitalista que puede estar bien hoy en día, pero que sabiendo cómo acabaron muchos regímenes comunistas, suena raro al saber que fue escrito en 1952. En fin, en todas partes cuecen habas.
Quien haya llegado hasta aquí está, sin duda, interesado por el libro. Léalo, lector.

escrito en alemán | leído en alemán

CUENTOS COMPLETOS – franz kafka

Compré este libro hace más de doce años y desde entonces he ido leyendo, de a poco, sus 83 relatos, novelas cortas y fragmentos. La excepción ha sido «La metamorfosis», que ya había leído años antes, justo antes de cumplir los 18. Entonces, su lectura me dejó una sensación de confusión, un preguntarme: ¿qué es esto que acabo de leer? La misma sensación se repitió al leer los primeros relatos de este libro. En aquel entonces yo cogía y dejaba inconclusas bastantes antologías de relato y poesía y ésta quedó en su rincón durante un tiempo, como libro confuso y extraño que me pareció.

Pero un día los relatos comenzaron a tener  sentido, a enganchar, a gustarme. Leí el número 25, «En la colonia penitenciaria», hará unos 10 años, y se convirtió en uno de mis relatos preferidos; un relato brutal sobre una máquina de tortura, pero también sobre el sinsentido que hay en el mundo, y me interesé más por Kafka y por el contexto en que escribió su obra. Entonces me mudé al extranjero y, a veces, leía unos pocos relatos más de visita en casa de mis padres. Así, durante años, fui entendiendo lo que significa el adjetivo «kafkiano», reconociendo y disfrutando los temas y el estilo que caracterizan a Kafka: la insignificancia y la doblegación del individuo ante una sociedad grande y abstracta ante la que debe postrarse, el esfuerzo y el terror por encajar en unas normas sociales que muchas veces no tienen sentido, el análisis interior de estas normas convertido en obsesión…

El verano pasado leí «El artista del hambre», otro relato magnífico que resume todo lo anterior, sobre un artista cuyo arte es el ayuno; comienza siendo admirado en el circo como un animal más, hasta que las modas cambian y ya nadie le hace caso, sin que él no pueda ya cambiar de modo de vida. Leí también «En nuestra sinagoga…», que contando la historia, tierna incluso, de un extraño monstruo que habita en una sinagoga, vuelve a los temas de la soledad, la incomprensión y la pequeñez frente a una sociedad paternalista que admite los esfuerzos inútiles de individualidad, únicamente porque no la comprometen. Los argumentos de estas historias evidencian el uso que Kafka hace de lo surreal.

Ahora me encanta Kafka. Comencé a leerlo sin estar seguro de que me gustara, sin entenderlo, y he terminado de leer sus historias con interés e ilusión. Mención especial al esfuerzo de la colección El Club Diógenes de la editorial Valdemar por reunirlas. Esta colección de libros de bolsillo asequibles me pareció magnífica en su momento y hace mucho que ya no la veo en librerías. Leed a Kafka. Diría que me da pena haber leído ya sus historias; pero aún no, aún me faltan por leer sus dos grandes novelas: «El castillo» y «El proceso».

escrito en alemán | leído en español

DER GETEILTE HIMMEL – christa wolf

La contraportada de mi edición, de DTV, cita un fragmento de las últimas páginas del libro: «Den Himmel wenigstens können sie nicht zerteilen» («El cielo, al menos, no pueden dividirlo»). La réplica de la protagonista da título al libro: «Doch. (…) Der Himmel teilt sich zuallererst» («Sí. (…) El cielo se divide antes que nada»).

Esta novela explora la belleza y la amargura del amor y del desamor en el contexto socialista de Alemania del Este. El punto de vista de la autora es interesante en cuanto que hay una clara contradicción de valores que no se resuelven, sin embargo, desde una óptica occidental. La protagonista, como la autora, es una mujer: risueña, soñadora y campesina, que pronto descubre la ciudad y, en especial, las rencillas de un mundo laboral influido por la política, y que nos cuenta su historia alternando tiempos narrativos, descripciones y diálogos, y con una belleza que tiene mucho de lírica.

El tono de la novela es desazonador y, desde el principio, parece que persigue un amor sin futuro, representación acaso de la escisión alemana. Creo que no la he leído en el mejor momento para entenderla y disfrutarla de veras, porque me ha sumido en pensamientos tristes y no me ha ayudado a superar una etapa difícil por la que estoy pasando; pero ahí está: una novela nostálgica y bella que, pese a su lírica, se niega a calmar la realidad con paños calientes.

escrito en alemán | leído en alemán

DIE BESTEN DEUTSCHEN ERZÄHLUNGEN – vv. aa.

Este conjunto de 45 relatos puntúa muy alto entre los libros más interesantes que he leído en alemán hasta el momento. Reúne relatos de 38 autores desde Goethe hasta nuestros días. Hay relatos para todos los gustos: serios y divertidos, de estilo barroco y sencillo. Unos pocos me han parecido rebuscados y apenas los he entendido; la mayoría me han gustado mucho y, algunos, me han emocionado.

Aquí hay perlas como Die Bremer Stadtmusikanten de los hermanos Grimm, que mi generación conoce de sobra por su producción televisiva: Los trotamúsicos. Se me han saltado las lágrimas leyendo Das Brot de Wolfgang Borschert, un relato que me ha parecido absolutamente genial. La ironía como vehículo para la crítica aparece en varios relatos, por ejemplo en Das Judenauto de Franz Fühmann o Der neuere (glücklichere) Kohlhaas de Christoph Hein. Aparecen relatos de grandes nombres de la literatura en alemán como E. T. A. Hoffmann, Rainer Maria Rilke, Alfred Döblin, Franz Kafka, Bertolt Brecht, Elias Canetti, Heinrich Böll, Siegfried Lenz o Martin Walser, y de otros autores (casi todos hombres) de quienes apenas sabía nada o desconocía totalmente pero que, estoy seguro, resuenan con fuerza en Alemania.

escrito en alemán | leído en alemán

IM STAHLGEWITTERN – ernst jünger

Cuatro meses enteros he tardado en leer la famosa crónica de Ernst Jünger sobre la Primera Guerra Mundial, basada en los diarios que escribió durante el conflicto. Aunque la curiosidad con que comencé la lectura no me abandonó hasta su final, la violencia extrema y costante que recorre cada página me produjo un rechazo difícil de superar.

El libro sigue la carrera militar del autor y tiene la batalla del Somme como punto álgido. El estilo es muy bueno y trata de ser objetivo, aunque en ocasiones destila un cierto tufillo a panfleto belicoso que, no obstante, debe perdonarse porque Jünger menciona a sus compañeros con nombres y apellidos, y es natural que desee darles homenaje.

La guerra de trincheras, las alambradas, los ataques con gas e incluso la erróneamente llamada gripe española aparecen, capítulo sí y capítulo también, dando una idea de cómo fue la guerra, sucediéndose absurdamente en busca de un objetivo superior que, de manera que a mí se me antoja kafkiana, el libro no se molesta en describir ni justificar.

En esto último, sin embargo, este libro difiere mucho del de Remarque, donde el esfuerzo por demostrar el absurdo de la guerra es plenamente consciente. Aquí —se nos dice— se trata de a visión de un soldado que no desea ver más allá de las órdenes que recibe. Algo más tiene, y mejor es leerlo, aunque cueste, que necesitar escibir otros libros semejantes.

escrito en alemán | leído en alemán